arrocera gelves y comercio electronico

El sector de la distribución y el comercio electrónico.


La gran distribución en España, en buena medida por la situación de bonanza económica y recuperación del consumo en España, ha suavizado los problemas vividos en épocas anteriores. En la actualidad encontramos en nuestro país cerca de 280 hipermercados, lo que vendría a suponer una media de 6,7 por cada millón de habitantes. 2,2 millones de metros cuadrados de superficie y 1,95 billones de pesetas de facturación.
Con cuatro grupos en cabeza Pryca-Continente, Alcampo, Hipercor y Eroski, que controlan dos tercios del total de la facturación podemos observar que este es un sector que vive momentos de gran concentración, especialmente plasmada en la fusión entre Carrefour y Promodès (Pryca-Continente-Supeco-Simago-Diasa). Este gran grupo obtendrá durante el año 1999 32.000 millones de pesetas de beneficio neto, poseyendo 114 hipermercados y más de mil tiendas de proximidad.
Estas cifras dejan pequeñas las estimaciones de facturación por la vía del comercio electrónico, que si bien aumentan exponencialmente año tras año, en 1999 supondrá, en España una cifra cercana a los 8.500 millones de pesetas.
El sector de gran distribución, y los productos de gran consumo, en la actualidad son los productos con menor presencia en la red.
Según la última encuesta de la AECE, la primera barrera para el crecimiento de formas de comercio on line de este sector es la inadecuación de los productos para la venta a través de internet, así como la unión del tanden público objetivo inadecuado con desconocimiento tecnológico del mismo.
Los que día tras día observamos como el comercio electrónico se va afianzando en los consumidores somos conscientes de que puede resultar más asequible comprar libros o discos a través de la red, que hacer la cesta de la compra. ¿Pero es esto una realidad? ¿Acaso los habitantes alejados de núcleos urbanos de importancia no demandarían la posibilidad de realizar su compra semanal tranquilamente desde su domicilio, recibiendo los productos puntualmente y sin tener que enfrentarse a colas de caja, e incluso a desabastecimiento de ciertos productos en el lineal?.
Esta es la filosofía que ha llevado a las empresas líderes de distribución españolas a abrir sus supermercados virtuales en internet. Pionera es la web de Alcampo (www.alcampo.es) La primera página en acercar el hipermercado a nuestros ordenadores, nos ofrece una página sencilla de navegar, con más de 10.000 productos en sus "estantes", y la incorporación de todas las secciones de un hipermercado.
Su competencia más cercana, Continente, también se ha sumado a la iniciativa de abrir supermercados virtuales (www.continente.es). En este caso, con una estética bastante arriesgada, muy en consonancia con un folleto electrónico, Continente permite hacer un recorrido por sus diferentes secciones, rellenando nuestro carrito, y enviándonoslo a casa.
Hasta aquí las perspectivas son halagüeñas, pero una vez continuamos con la visita a otras páginas de los grupos líderes de distribución, www.eroski.es o www.pryca.es lo que vamos a observar son meras páginas corporativas, bien programadas, con información interesante sobre la compañía, la localización geográfica de sus centros, o servicios de atención al cliente a través de correo electrónico. Pero no intentemos comprar una barra de pan o una caja de botellas de nuestro refresco favorito.
Sí que hay un grupo líder en el sector del consumo como es El Corte Inglés, (www.elcorteingles.es) el cual ofrece un site más completo, desde donde se pueden acceder a multitud de productos, realizar compras a través de servidor seguro, y también ofrece productos de alimentación, bazar y en definitiva lo que buscamos cuando acudimos todas las semanas a nuestro hiper más cercano.
Ante esta situación se plantea realizar una reflexión sobre el tan cacareado "estar en internet". Estamos viendo como se está desaprovechando claramente un importantísimo sector de la economía. Ciertamente razones como que el producto es inapropiado o la falta de cultura informática de los compradores nos parecen meras excusas ante la apuesta decidida por la incorporación de fórmulas nuevas de acudir al supermercado.
Publicado en multitud de ocasiones, sabemos que los líderes de hoy en internet fueron los primeros en arriesgarse antaño. ¿Acaso los creadores de Amazon pensaron una vez que los lectores de libros no iban a acercarse a un medio electrónico para solicitarlos y comprarlos?.
Hoy podemos comprar champán francés (www.champagne-espress.com), caviar beluga (www.caviar-direct.com) , y hasta hamburguesas en la red. Hacemos peticiones de libros, discos, billetes de avión, y todo tipo de servicios imaginables. ¿Hasta cuando tendremos que coger el coche, conducir hasta el hiper, navegar entre decenas de lineales entrechocando nuestro carrito con otras personas, no encontrar lo que realmente queríamos, hacer cola para pagar, volver a conducir hasta casa, y subir la cesta de la compra?. Y eso cuando tenemos ascensor...
Fernando Checa García